Indefenso?

Sentado sobre mi muralla, con las armas caídas.
Sin querer defender mi espacio vital,
noto como intenta la reconquista.
Deseando ser conquistado, noto su esfuerzo.
Deseando dejarme llevar, noto sus ganas.

(Para quererse, no hacen falta más que las ganas.)

Si eso fuese cierto no tendría esta sensación de pensar que eso no ocurrirá, que mi muralla, aun sin defenderla, aguantará impertérrita, que mi corazón no entiende de mis deseos y que por mas que quiera no podré engañarlo.

Demasiadas cosas juntos para no intentarlo,
demasiadas cosas juntos para poder olvidarlo.
No me gusta olvidar, es como si dejases de vivir algo que pasó.
No puedo olvidar las cosas importantes de mi vida.

“Antes que el sentimiento de su alma, brotará el agua de la estéril roca.”
No dejo de pensar en esta frase ...